Hoy visitamos uno de los lugares más emblemáticos del Monte Ulía: los restos denominados como los de “las ruinas del molino”, pero que en realidad nunca tuvieron esta función. Nunca sirvieron como un molino. Esta construcción de piedra arenisca es la estructura que queda de un antiguo café que recibía el nombre de “Chalet de las Peñas”.
En esta postal de la época puedes ver cómo la estructura de piedra servía de esqueleto para construir a su alrededor una bonita cabaña-mirador de madera. En el «Chalet de las Peñas» se servían cafés y las personas que subían al Monte Ulía lo aprovechaban para descansar, socializarse y observar las magníficas vistas.
En la Belle Epoque de San Sebastián el Monte Ulía era un importante lugar de ocio y recreo en Donostia. Algo así como el parque de atracciones de la época. Lo que hoy es Igueldo, pero en el lado este de la ciudad. Por eso existían este tipo de construcciones, con el objetivo de atender a los donostiarras que subían al Monte Ulía y pasaran una bonita tarde o mañana.
Aquel café recibía el nombre de “Chalet de las Peñas” porque estaba muy cercano a las peñas de los balleneros, desde las cuales los balleneros observaban el horizonte esperando atisbar un grupo de ballenas. Matizamos que nos ubicamos en la ladera norte, la que mira al mar.
Los restos arquitectónicos se han remodelado para guardar un vestigio de aquella época dorada en San Sebastián-Donostia. Hoy no tiene más función que la de servir de memoria para que las nuevas generaciones de donostiarras no olviden aquella época. Es un lugar de paso, perfecto para descansar en las excursiones al Monte Ulía. El entorno es una maravilla. Monte y mar, a pocos metros de distancia.
En el siguiente mapa te marcamos la ubicación exacta del antiguo “Chalet de las Peñas. Puedes acceder a través de los muchos caminos del Monte Ulía, pero si es la primera vez que vas te recomendamos que los hagas por el camino fácil. Llegar a pie o en vehículo hasta el parking y después subir por el camino asfaltado hasta la curva. Allí, gira a la izquierda y verás enseguida, imponente, la torre de piedra caliza, que durante muchos años acogió un bonito café en mitad del monte. La explanada verde que destaca en la fotografía, a pocos metros del molino, es el Merendero de Ulía. Tómalo como referencia para llegar de forma rápida.
Desde el Hotel Monte Ulía de Donostia esperamos que esta excursión haya sido de tu agrado. Hemos visitado unos restos históricos, recordando la Belle Epoque de San Sebastián. Y además hemos disfrutado de las magníficas vistas que nos proporciona el Monte Ulía.
[…] También llamado “Chalet de las Peñas”, un antiguo bar-mirador que había en la zona. En este otro artículo de nuestra página web te hablamos con más detalle de este curioso […]